Cuidado con las mordidas de gato

Un gato agresivo
 cynoclub/Getty Images

Recibir una mordida de un gato no es una experiencia agradable, pero es parte de la vida entre mininos. Lo importante es saber reaccionar adecuadamente y tomar acción antes de que se convierta en problema. 

¿Por qué me muerde?

El gato es cazador. Aprende con mamá a atrapar su comida y defender su territorio. Aunque ahora conviva contigo y se comporte tranquilo el 95% del tiempo, recuerda que ese instinto lo lleva en su sistema y lo utiliza cuando cree prudente. Situaciones que cambian drásticamente su rutina, desde un nuevo juego de comedor hasta la llegada de un bebé pueden activar al gato a seguir su instinto de supervivencia. Permitirle jugar brusco con tus manos o pies es llamar a la mordida. 

¿Qué hacer luego de la mordida? 

Vamos por pasos:

  1. Lo primero que debes recordar es NO defenderte con violencia. Ustedes no hablan el mismo idioma y lo que para ti es una enseñanza, para el gato es comenzar a alejarse de ti.
  2. Si mordió y salió corriendo, procede al #3. Si el gato mantiene sus dientes en tu piel, desvía su atención para que se despegue. Tratar de forzarlo te puede causar más daño. Un cambio de perspectiva, como acercarte a su cara seriamente es un buen truco para confundirlo y que abandone su ataque.
  3. Permite que la herida sangre. Esto ayuda a eliminar gérmenes. Si la herida parece no sangrar, fuérzala a que lo haga. El dolor que sientes ahora se multiplicará si permites que se convierta en infección.
  4. Lava bien la herida con agua tibia y jabón mientras le das masaje para limpiar el área interior. Los dientes de los gatos son afilados y cuando muerden llegan bien adentro. No siempre las bacterias pueden ser eliminadas con un simple enjuague. Si tienes en casa sulfato de magnesio, como Epson Salt, añádelo al agua. Sus componentes ayudan a sanar heridas naturalmente. 
  5. Luego de limpiar bien el área, coloca crema antiséptica y cubre la herida.

Nota: Mientras vas limpiando analiza cuán profunda es la herida y si necesitas ayuda médica. Las mordidas de gatos parecen pequeñas, pero la infección crece del interior hacia afuera. No la pierdas de vista. Si observas cambios negativos visita a tu médico.

La rabia—el peor enemigo

Esta condición es letal para humanos y gatos. NO JUEGUES CON TU SALUD. 

  • Si el gato que te mordió fue tuyo y sabes que está vacunado, no debes preocuparte. 
  • Si el gato es de algún conocido, pregunta si el minino está vacunado contra la rabia.
  • Pero si el gato es callejero, lava bien la herida y ve de emergencia a tu médico u hospital.

Señales de infección severa

La mayoría de las mordidas de gato no llegan a consecuencias graves. Los resultados infecciosos comienzan a reflejarse en las primeras 12 horas del incidente. Cualquiera de estos síntomas es señal de consultar con tu médico. Una receta de antibióticos a tiempo solucionan el problema.

  • Inflamación 
  • Area enrojecida
  • Náuseas
  • Dolor de cabeza y/o cuerpo

Personas con más riesgo

  • Niños: A los chicos les encanta jugar con los mininos. Pero al no entender el comportamiento del gato, suelen ser arañados o mordidos a menudo. Para evitar problemas, un adulto debe supervisar sus juegos. 
  • Personas mayores: Sus reflejos no son tan rápidos y su piel es más fina. Cualquier daño es peligroso. 
  • Personas con sistemas inmunológico débil: Pacientes con VIH positivo, problemas de riñones y falta del bazo por ejemplo corren más riesgo de que la mordida se infecte aunque sea superficial. 

Prevención

Es imposible decir que tu gato nunca te va a morder, pero conociendo las señales que su lenguaje te indica sabrás cuando mover el brazo antes de recibir el impacto.